Mientras ella dormía
mi corazón me preguntaba cada instante dónde estaría.
Mientras ella se desperezaba, y tomaba el primer café, y aún seguía en pijama
Yo seguía con el alma en vilo,
pensando en ella, en su sonrisa y su mirada…
Mientras ella se despertaba
Y empezaba a leer los mensajes no leídos
Yo llevaba ya varios capítulos soñados y alguno escrito
Esa madrugada y esa mañana de domingo
Con su sonrisa de compañera…
Mientras ella aún no sabía qué hacer
Ni a dónde iría esa tarde de fin de agosto, aún sin maquillaje,
Yo ya me había barnizado el corazón
con la miel dulce de sus ojos castaños,
y había construido un castillo para ella sobre la arena de mis sueños…
Mientras ella volvía a dormirse
Yo seguía reconstruyendo viejos sueños caídos
Y pintando horizontes que compartir
Para cuando despertara
Para cuando llegara, por fin, esa tarde de domingo…
© Javier L. García Moreno
Agosto 2022